Thy Flesh Consumed es en realidad el 4º de los capítulos del primer Doom, que fue lanzado incluso después de Doom II en el recopilatorio Ultimate Doom. Realmente es el capítulo que enlaza la primera y la segunda entrega, pero no salió hasta después de esta, más que nada porque la historia tampoco es que fuera la panacea. En resumen, Doom Guy está bastante cabreado por la muerte de Daisy y decide tomarse la justicia por su mano nada más llegar a la tierra.
Tanto es su afán de seguir matando demonios, que consigue derrotar a una nueva Spider Mastermind, pero aunque su intención era buena, no era lo suficientemente eficaz, y la invasión infernal sigue avanzando.

Despertamos en un sarcófago, una especie de zombie nos ataca e instintivamente lo matamos con facilidad. Ahora ya no somos un marine cualquiera. Los demonios solo pudieron encerrarnos en un ataud y escondernos en un rincón del infierno, poniendo nuestro símbolo grabado para que nadie se atreviera jamás a liberarnos. Ellos fueron los que nos pusieron el nombre, Doom Slayer, el Cazador del Infierno. Pero ahora, somos libres de nuevo. Libres para seguir matando y destrozando demonios. Es nuestro deber.
Pero centrémonos en este artículo, porque la historia completa del Doom Slayer la contaremos más adelante, ya que merece un texto por sí solo. Estamos en Marte, la UAC, de nuevo, ha montado una mega instalación con decenas de miles de trabajadores, pero la invasión demoníaca ya está en curso, como nos indica la propia IA que lleva el sitio, VEGA. Entre ella y el doctor Samuel Hayden nos guiarán para intentar salvar lo que queda de la base. Con nuestro traje de Pretor, avanzaremos buscando desactivar la Torre Argent, que es el origen del propósito de la UAC en el planeta.

Con una tierra sin recursos, la energía Argent supone un enorme avance para la civilización, pero lo que nadie sabía es que esta energía se extraía precisamente del Infierno. Es la doctora Olivia Pierce la encargada de los experimentos en Marte, la que paralelamente y sin el conocimiento de Samuel Hayden, comienza a montar todo un culto religioso en el que incluso los humanos se ofrecen como sacrificio, creyendo a los seres del Infierno como una nueva deidad que los salvará a todos.

La Torre Argent es precisamente la que guarda una nueva puerta al Infierno, por la que el Doom Slayer entra para descubrir como parar la invasión. Allí encuentra los testamentos, que le revelarán que no sólamente es un guerrero legendario, si no que es o fue el líder de una raza o civilización de combatientes llamada los Centinelas de la Noche (Night Centinels). Con la ayuda del Crisol y manipulado por Hayden, el Doom Slayer consigue acabar con un enorme CyberDemon y en última instancia, con la propia Olivia Pierce, que tras su llegada al infierno revela su verdadera cara, la Spider Mastermind, el último boss del juego. Lo último que veremos es a Samuel Hayden diciéndonos que el no es el malo, y que todo lo que está haciendo es por una buena causa. Pero atrapará al Doom Slayer y mientras se despide, parece lanzarlo de nuevo a otra dimensión, que no conocemos.